Se trata de una variedad de uva blanca autóctona de la denominación de origen Rías Baixas en Galicia. Sus origenes no están claros pero existen varias teorías sobre sus primeras apariciones a raíz de la llegada de los Monjes de Cluny en el siglo XII al Monasterio de Armenteira (Val Do Salnés) cuando comenzaron a cultivar esta variedad para el autoconsumo. Después se fue extendiendo por toda la región gracias al cultivo de numerosas familias y de pequeños bodegueros que comenzaron a plantar sus propios viñedos en forma de las clásicas parras de la zona.
El Albariño se presenta en racimos pequeños de color verde-amarillento cuya maduración resulta algo temprana. Los vinos que produce presentan un color amarillo pajizo generalmente, con aromas florales y frutales de intensidad media-alta y persistencia media-larga. En boca son realmente equilibrados, armoniosos y frescos.
Los viñedos de esta variedad se pueden encontrar en la denominación de origen Rías Baixas, Ribera Sacra y California. En la Ribera del Rin existe una variedad muy semejante, que en un principio se pensaba que los origenes del albariño se podían situar en ella, pero a día de hoy, esta teoría está totalmente descartada, pues genéticamente no coinciden.